Comunicaciones Técnicas de Café

Número 76 - Junio 2017

Ramírez Caficultura desde Costa Rica

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Variedades pierden resistencia a la roya en Centroamérica.
¿Qué aspectos son prioritarios para abordar el problema?

Ing. Jorge Ramírez Rojas
Consultor Experto en Café

La roya en Centroamérica

El primer brote de roya del cafeto en Centroamérica fue detectado en noviembre de 1976 en la región del Pacífico de Nicaragua, posteriormente y de manera gradual se encontró en otros países de la región; en 1979 en El Salvador, en 1980 en Honduras y Guatemala, en 1981 en el estado de Chiapas, México, en 1983 en Costa Rica y poco después en Panamá.

40 años después de haberse encontrado la roya en Centroamérica, se han dado épocas de mayor o de menor severidad de la enfermedad, dependiendo principalmente de factores climáticos que en determinadas periodos han favorecido un mayor ataque y afectación causado por el hongo.

Sin embargo, ha sido la epifítia de esta enfermedad ocurrida en el año 2012, la situación de afectación de mayor impacto causada por el hongo en la caficultura de la región, al provocar grandes pérdidas económicas a los productores y severo daño a la condición agronómica de las plantaciones en casi todas las regiones cafetaleras.

La respuesta de instituciones cafetaleras y de algunos otras organizaciones regionales ante esta situación, estuvo centralizada en desarrollar campañas de capacitación y divulgación técnica, entregar insumos para el combate de la enfermedad y en algunos casos semilla o almácigo de variedades con resistencia o tolerancia a la enfermedad.

Además, algunas empresas y organismos internacionales patrocinaron encuentros de técnicos y representantes institucionales por medio de foros y eventos que fueron más que todo reuniones de análisis muy general de la situación de la roya en los países, sin que por medio de estas actividades se lograra llegar a establecer acuerdos ni concretar acciones que ayudaran efectivamente a realizar estudios especializados sobre la situación de la roya en la región.

La realidad es que existe una gran carencia de proyectos de investigación debidamente integrados para actualizar el conocimiento sobre lo que está pasando con la roya en la región y así poder determinar tanto la estrategia correcta de atención al problema, como las acciones a llevar a cabo en las áreas de investigación y transferencia de tecnología.

 

Antecedente de estudios puntuales sobre roya en la región

Con la presencia confirmada de la roya del cafeto para los años 80 en todos los países de Centroamérica, el PROMECAFE (Programa para el Mejoramiento de la Caficultura de la Región) con el apoyo del proyecto IICA/AID, realiza una intensa actividad en la región que facilita el ingreso de material genético con resistencia a la roya proveniente de Brasil y Portugal a través de la Universidad Federal de Viçosa (UFV) y del Centro de Investigación de las Royas del Cafeto (CIFC) respectivamente.

Como parte del seguimiento del comportamiento de los materiales genéticos más sobresalientes y de la situación de la roya del cafeto en la región, a principios de los años 80 el PROMECAFE contrató la asesoría del Dr. Aníbal Jardim Bettencourt (fallecido en 2015) experto del CIFC de Portugal de amplia trayectoria y experiencia en el conocimiento sobre los temas de las razas fisiológicas de la roya, fuentes de resistencia y transferencia de genes de resistencia a variedades comerciales de café.

Como parte de esta asesoría en el año 1985 el Dr. Bettencourt realizó una evaluación de los progresos alcanzados en la ejecución de los programas de mejoramiento genético y la situación de la roya que para ese entonces tenía pocos años de estar presente en la región.

El experto visitó los proyectos de investigación en ejecución con variedades resistentes y valoró la situación de la roya en diferentes regiones de México, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá, participó también en actividades de capacitación con los técnicos de los países, visitó los centros de investigación y compartió sus conocimientos con los encargados de los programas de roya y de mejoramiento genético.

Los resultados obtenidos a partir de este trabajo permitieron la consolidación de los programas de mejoramiento en los países de la región, lograr una mejor comprensión del problema de la roya y del panorama que podía esperarse para los años siguientes, la actualización del conocimiento sobre el tema de las razas de roya y la valoración especializada de los genotipos más promisorios para ser liberados como variedades comerciales.

 

Nuevas razas de roya una situación natural y esperable

La presencia de nuevas razas fisiológicas de roya en la región de Centroamérica, no debe tomar por sorpresa al sector cafetalero, pues basta con acudir al registro histórico de la aparición de razas de roya en el mundo, para darse cuenta que por décadas y de manera progresiva, se han ido acumulando los reportes de hallazgos de nuevas razas en muy diferentes regiones.

La información disponible evidencia claramente esta situación de la siguiente manera: en 1930 había solamente 3 razas de roya conocidas, para 1967 el número de razas había llegado a 32, en 1980 eran 39, para el año 2005 se contaba con 45 razas reportadas y para el 2017 ya hay más de 50 razas de roya debidamente identificadas por el CIFC de Portugal.

Actualmente en Brasil hay 17 razas distintas de roya identificadas, mientras que en Colombia se han confirmado 6 razas de roya. Por tal razón no es de extrañar nuevos hallazgos en Centroamérica como ya ocurrió en Costa Rica en 2013, con la identificación de las razas XXIV y XXXVI confirmado por el CIFC a partir del análisis de muestras recolectadas en algunas zonas cafetaleras del país.

En Colombia con una extensión actual cultivada de café de unas 960.000 hectáreas, se han identificado tal como se mencionó, al menos 6 razas de roya. Mientras tanto el área total sembrada de café en Centroamérica suma una extensión similar a la de Colombia y se encuentra establecida en muy diversos ambientes, por lo tanto, sería ilusorio pensar que en nuestra caficultura regional, podríamos gozar del privilegio de permanecer con las mismas razas de roya identificadas desde hace cuatro décadas.

Entonces el problema no es en sí la aparición de nuevas razas de roya en la región, sino más bien el vacío de información científica que existe sobre el tema, el cual limita enormemente la toma de decisiones adecuadas y oportunas por parte de las autoridades cafetaleras a partir de la información técnica, así como el desarrollo de los planes de acción necesarios para informar y brindar las mejores recomendaciones a los productores de café.

 

Grupos de variedades con resistencia tienen origen común

Si se analiza el antecedente de las variedades con resistencia a roya en la región, encontramos el grupo de los catimores derivados de la hibridación de Caturra CIFC 19/1 x Híbrido de Timor 832/1, que por el método de mejoramiento de selección genealógica dio origen a variedades como Lempira, IHCAFE-90, Oro Azteca, CR-95 y algunos otros materiales similares.

Por otro lado, está el grupo de los sarchimores todos derivados de la hibridación de Villa Sarchí x Híbrido de Timor 832/2 y a partir de una de las plantas del híbrido resultante CIFC H361/4, se han sintetizado también por el método genealógico numerosas variedades como Obatá, Tupi, IAC 125 RN, Parainema, Cuscatleco, Limani, IAPAR-59, IPR-97, IPR-98. Igualmente, otros materiales con el mismo origen están siendo promovidos para siembra comercial en la región.

Es de esperar entonces que, si una nueva raza de roya llega a “quebrar” la resistencia de una variedad representante de alguno de los grupos, al tener estos la misma carga de genes de resistencia, es de suponer que en un plazo no muy lejano otras variedades del mismo grupo comiencen a perder resistencia si son atacados por esa raza.

Cabe indicar eso sí, que entre estas variedades pueden existir diferencias en cuanto a productividad, resistencia a otras enfermedades, épocas de maduración, color del brote entre otros, en virtud de la fijación de algunas de estas características realizada durante el proceso de selección de las variedades.

Sin embargo, no van a diferir en cuanto al comportamiento de reacción a las diferentes razas de roya, el cual debería ser común para las variedades del mismo grupo.

 

¿Por qué han faltado estudios precisos sobre roya?

Simplemente porque no ha existido suficiente voluntad por parte de las autoridades administrativas de las instituciones y organismos de la región, para dar prioridad a la realización de estudios especializados sobre la roya, mediante la participación y asesoría de expertos de centros de investigación altamente calificados como el CIFC de Portugal.

Tampoco se ha contado con un efectivo compromiso de apoyo por parte de representantes de misiones internacionales que se encuentran en la región desde hace muchos años y que desde la crisis de la roya del 2012 a la fecha, no han sido capaces de ayudar a las instituciones cafetaleras para concretar los vínculos de coordinación necesarios que permitan desarrollar un proyecto conjunto con el CIFC, para la realización de estudios científicos sobre la situación de la roya en Centroamérica.

En los últimos años también se han hecho presentes otros actores que se mueven alrededor del tema de la roya en la región, pero cuyo interés no parece estar dirigido hacia lograr apoyo para realizar estudios científicos sobre la enfermedad, sino más bien en promover de diferentes maneras la siembra de materiales genéticos, algunos de estos aún pendientes de demostrar que pueden ser superiores a las variedades más conocidas en la región, en cuanto a los parámetros que realmente le interesan a los productores y a la industria como son: productividad, resistencia a la roya y calidad de taza.

 

ASPECTOS PRIORITARIOS PARA ABORDAR EL PROBLEMA

El panorama actual en la región de Centroamérica plantea una situación de falta de información científica sobre el tema de las razas de roya, mucha oferta de variedades y otros materiales genéticos algunos liberados por las instituciones cafetaleras y otros con similares características ofrecidos por otras empresas.

Ha sido frecuente desde el 2012, la realización de numerosas reuniones, seminarios, congresos, cumbres y propuestas para la ejecución de proyectos, sin embargo, todo esto no parece haber contribuido hasta ahora de manera significativa con resultados positivos concretos.

Por el contrario, hoy en día prevalece un ambiente de preocupación e incertidumbre por parte del sector cafetalero, más aun con la situación actual de la pérdida de resistencia a la roya encontrada según los reportes oficiales, en algunas variedades comerciales y posiblemente algunas otras que por diversas razones todavía no las han dado a conocer.

Por eso hemos considerado oportuno agregar algunas sugerencias a lo dicho ya sobre el tema de la roya en Centroamérica, en el caso que algunas de las observaciones planteadas aquí, puedan ser de utilidad en la elaboración del plan de acción que suponemos, ya está siendo diseñado para abordar apropiadamente este nuevo problema de la roya en la región.

 

1. Evaluación agronómica de las variedades que están resultando susceptibles

La pérdida de resistencia a la roya de algunas variedades, no debe impedir que estos genotipos puedan ser valorados en cuanto a su desempeño comercial actual de productividad, respuesta a otras enfermedades y plagas importantes distintas a la roya, así como la calidad de taza que presentan.

La determinación de que estas variedades o al menos algunas de ellas puedan mantener cualidades agronómicas y de calidad sobresalientes, perfectamente puede llevar a la determinación de la conveniencia de continuar recomendando su manejo comercial, complementado con programas eficientes de control de la roya.

Este estudio debe ser realizado por expertos en agronomía de las instituciones cafetaleras en cada país. A la vez es oportuno tomar muestras de las variedades que en apariencia están manteniendo la resistencia, a fin de que puedan ser sometidas a las pruebas correspondientes, en los centros especializados para la confirmación de la resistencia.

 

2. Valoración del germoplasma que se encuentra en la región

En algunos centros de investigación de la región y fincas controladas por las instituciones cafetaleras, se encuentran diferentes materiales genéticos, algunos de los cuales podrían tener un valor importante para llevar a cabo un programa de evaluación y selección con miras a rescatar material valioso contra la roya.

Sin embargo, es la colección internacional de café que se encuentra en terrenos del CATIE en Costa Rica, uno de los principales bancos de germoplasma del mundo, y por tanto la fuente principal de diversidad genética que afortunadamente se encuentra al alcance de los investigadores y expertos de la región.

Para llevar a cabo trabajos en esta dirección, es necesario unir esfuerzos para desarrollar proyectos regionales entre las instituciones apoyadas por PROMECAFE, para lo cual se debe conformar un equipo de expertos de diferentes áreas de investigación de las instituciones cafetaleras, para evaluar germoplasma de la colección del CATIE con características de interés, aprovechando por supuesto la información científica que ya ha sido generada a partir de los resultados de estudios realizados con anterioridad.

 

3. Integración del Comité Técnico de Mejoramiento Genético

Se debe activar la organización y funcionamiento de un comité técnico de mejoramiento genético conformado por expertos de las instituciones cafetaleras en esta área de investigación y bajo una coordinación muy activa por parte de PROMECAFE.

Este equipo técnico deberá establecer las pautas a seguir en relación con los proyectos de investigación que se deben desarrollar a nivel regional en mejoramiento genético y participar liderando los estudios en cada uno de los países.

Asimismo, dentro de las atribuciones de este Comité debe estar la valoración y definición de las organizaciones, empresas o centros de investigación a los cuales se debe acudir para establecer convenios o acuerdos de cooperación técnica, para que realmente sea la caficultura de la región la que se pueda ver beneficiada con los resultados de estos proyectos.

 

4. Delegar la representación técnica institucional en los expertos

Uno de los aspectos que más interfiere en el análisis técnico y científico racional de los temas especializados del cultivo en este caso de la roya, es la mala decisión o la pésima costumbre de algunos jerarcas de instituciones que todavía continúan enviando funcionarios administrativos por lo general de alto rango, para que asistan a los foros, congresos y giras de campo que de antemano se sabe son actividades eminentemente de carácter técnico.

Esta acción no solamente descalifica la gestión técnica de sus colaboradores, sino que también debilita fuertemente el aporte al análisis y la discusión de los temas que se debe realizar para llegar a las mejores conclusiones y recomendaciones.

El estudio del problema de la roya en la región podría ser una ocasión propicia para que comiencen a suprimir esta práctica inconveniente y se proceda siempre a delegar la representación institucional para el análisis de los temas técnicos, a los expertos en cada una de las áreas de investigación del cultivo.

 

5. Contratación de una asesoría al CIFC de Portugal

Esta es una decisión trascendental que deben tomar las instituciones cafetaleras de la región con apoyo del PROMECAFE. La realización de un estudio científico integrado sobre la situación actual de la roya en Centroamérica, servirá para establecer las bases de conocimiento necesario para definir las estrategias técnicas e institucionales para enfrentar la enfermedad en los próximos años, con mayor eficiencia y oportunidad como ayuda y respaldo para los productores de café de la región.

El estudio deberá contemplar entre otros aspectos especializados, la realización de un reconocimiento completo y representativo de la roya, mediante la toma de muestras en las diferentes regiones y condiciones ecológicas donde se cultiva café en cada uno de países.

Un muestreo de buena calidad permitirá realizar estudios en el CIFC sobre las razas de roya presentes y llevar a cabo la caracterización de la agresividad del patógeno en las diferentes regiones geográficas y con las principales variedades que se cultivan en Centroamérica.

Se debe incluir también como parte del proyecto, la evaluación de la situación actual de las variedades con resistencia a roya que se están sembrando en los países. Este trabajo debe realizarse de manera conjunta entre los expertos del CIFC y el equipo técnico de mejoramiento genético de las instituciones cafetaleras.

 

6. Capacitación a técnicos y productores

Aprovechando la presencia de expertos del CIFC en la región y la posibilidad de que en determinado momento se pueda también invitar a especialistas en mejoramiento genético y fitopatología de Brasil; se debe realizar un proceso de capacitación intensiva de los técnicos relacionados con la actividad cafetalera en todos los países.

Estas capacitaciones deben servir de base para que posteriormente se lleven a cabo actividades de transferencia de tecnología dirigidas a los productores de café de las diferentes regiones, para explicar sobre la situación actual de la roya utilizando la información de los nuevos conocimientos sobre el tema, aclarar muy bien el papel de las variedades con resistencia o tolerancia, su origen y potencial como estrategia de control de la roya, y recalcar sobre los aspectos del manejo integrado para el control de la enfermedad.